El caso Dani Alves tomó un nuevo giro luego de que el brasileño revelara su verdad respecto de lo que ocurrió a fines de diciembre en una discoteca de Barcelona. Para quienes no están en tema, el jugador estaba en una discoteca con amigos, y en un momento, tal y como mostraron las cámaras del lugar, fue al baño solo. Minutos después, entró una mujer y al rato salieron. Esa mujer lo denunció al brasileño al otro día por abuso sexual, y a partir de ahí se dieron una serie de sucesos que Alves no supo manejar ya que cambió hasta tres veces su declaración, algo que para la justicia es inadmisible.
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Durísima carta de Dani Alves desde la cárcel a Joana Sanz, su ex esposa, tras el divorcio
El caso, fue que el brasileño primero manifestó que no había tenido sexo con esa mujer. Luego, eso se pudo comprobar científicamente y por ende, quedó comprometido. También dijo que no conocía a la mujer, algo que al parecer sí era cierto. A poco más de seis meses para que se conozca la sentencia final, el brasileño confesó por qué mintió ante la justicia al decir que no había tenido relaciones sexuales con la mujer y ello podría alivianar el posible castigo en caso de ser declarado culpable de violación.
En su última declaración a la justicia, Alves confesó que mintió porque eso pondría en riesgo su matrimonio con Joana Sanz. Ahora, que se separó, reveló que no quería que se supiera que tuvo sexo porque implicaría que su esposa lo deje.
El testimonio final de Alves
“Esas chicas vinieron a nuestro reservado pero nosotros no insistimos, ni el camarero a ellas. Noté su buena disposición por la manera como bailaba, como se acercaba a mí, como intercambiábamos posiciones. Era una cena de reencuentro con amigos después del mundial. Nos pusieron allí por el simple hecho de que esta mesa tiene un baño. Le dije de trasladar todo eso al baño. Me dijo que sí, que no había problema. Le dije que yo iba primero y que la esperaría dentro. Dos veces le pregunté si le estaba gustando y me respondió que sí. Si la hubiese visto en la salida, la hubiese parado para preguntarle qué le había pasado porque hasta entonces todo estaba bien, dentro de lo que queríamos. Yo fui simplemente un cómplice de las ganas que ella tenía o de las que tenía yo”.
Este testimonio hace que la causa tome un giro ya que la fiscalía trabajará para intentar comprobar que Alves ahora sí dice la verdad, dándole importancia a la causa por la que mintió inicialmente, que fue bien tomada por la justicia. Por el momento, el jugador permanece en prisión y recién a fines de año se conocería la posible pena en caso de ser encontrado culpable.