Leandro Paredes ha sido uno de los mediocampistas argentinos que más veces ha estado en el ojo de la tormenta. Más allá de grandes títulos ganados, hay un caso con respecto a su trayectoria que es interesante, y que refleja tal vez el poco protagonismo que ha tenido a lo largo de su carrera, en relación al talento que ostenta.
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Paredes es un jugador elegante, con mucho talento, que tiene la capacidad de saltar líneas, de poner pases filtrados y de controlar el mediocampo con altura. Más allá de sus cualidades, siempre ha sido criticado, sobre todo en Argentina, por el posicionamiento, que no era de un volante central puro, y demás cuestiones. Su carrera, al igual que su posición y protagonismo, han ido cambiando.
Recordemos que en sus inicios como jugador, en Boca Juniors, lo hacía como un enganche clásico, y más allá de no haber sido tenido en cuenta, en cuanto a la relación de minutos, logró anotar cinco goles, dos a San Lorenzo, dos a Racing y uno a Tigre. ¿La particularidad? que todos fueron remates de larga distancia, dando a exhibir una de sus mayores cualidades, la pegada.
Luego, el desafortunado episodio de la patada de Orión lo marginó de Boca, además de no ser bien cuidado en ese entonces. Tras un fallido préstamo al Chievo Verona, donde tampoco sumó minutos por lesiones, llegó a la Roma, que puso 6 millones de dólares por el volante. Allí jugó 54 partidos, pero sólo fue titular en el 60% de los minutos. El equipo italiano logró prestarlo a otro del mismo país, el Empoli. Fue allí donde Paredes fue titular y disputó el 90% de los minutos como jugador profesional.
Tras dicho paso por la Serie A, apareció una oferta del Zenit de Rusia, que dejó más que conformes a la Roma, que recibió 23 millones por la transferencia. Allí Leandro Paredes encontró, lejos de la elite, minutos, protagonismo, y un equipo plagado de argentinos, como Mammana, Kranevitter, Rigoni y Sebastián Driussi, de River e Independiente, respectivamente.
Pero su gran paso fue al Paris Saint Germain, cuando el club parisino desembolsó 40 millones para hacerse con los servicios del argentino. Allí, Paredes jugó el 80% de los minutos, siendo protagonista y teniendo actuaciones muy destacadas, como en la Champions de la temporada 2019-2020, en donde el conjunto de la capital francesa llegó a la final, y cayó por 1-0 ante Bayern. Lo llamativo es como el PSG prescindió de el, y lo cedió a la Jueventus, en donde tan sólo jugó el 8% de los minutos posibles. Puso por delante a jugadores como Danilo, Fabián Ruiz y Renato Sanches, y ninguno logró estar a su altura…