- La genial reacción de Lionel Scaloni con Julián Álvarez: “¡Ahora hablás, boludo!”
- Leo Messi y el debate alrededor de la cantidad de títulos que tiene: cuántos son en realidad
Horas antes del inicio de la final, Gerardo Martino debió desafectar a Leo Messi de la lista de convocados dado que el mejor de la historia no estaba en condiciones físicas. Frente a Toronto, por la MLS, sufrió una molestia muscular en uno de sus isquitibiales y si bien tuvo algunos entrenamientos con el equipo, no pudo hacerlo al máximo dado que su cuerpo no respondió y como era de esperarse ante ese escenario, lo vio desde la grada del DVR PNK Stadium, que lució colmado y con la presencia de figuras como Zidane y Giani Infantino, presidente de la FIFA. Dos goles del Dynamo en el primer tiempo, Dorsey y Bassi, fueron suficientes y decisivos para superar a un Inter que descontó sobre la hora por medio de Josef Martínez, pero no le alcanzó y se le escapó así la US Open Cup.
Si bien era un secreto a voces su ausencia, había esperanza de que al menos Messi integrase el banco de los suplente, pero ni eso. El mejor de todos los tiempos llegó al estadio minutos antes del inicio, vestido con una camisa negra mangas cortas, acompañado de su esposa, Antonela Rocuzzo, y la marca personal de su guardaespaldas, Yassine Cheuko, con el fin de acompañar a sus compañeros en una jornada histórica para el elenco de Miami Sorpresivamente, se vio a ambos sin sus hijos. Tanto Thiago, como Mateo y Ciro llegaron minutos más tarde a la grada.
Las reacciones de Messi
Una de las primeras reacciones de Leo fue al minuto 11, cuando Escobar cruzó fuerte a Cremaschi en una dividida y acompañó el murmullo del estadio mostrándose sorprendido por la fiereza de la entrada. Hasta Antonela reaccionó a la jugada. Con chicle en boca, Leo opinaba y dejaba ver algunas risas tras ciertos intercambios. Como un hincha más, se levantaba de su asiento cada vez que el equipo atacaba reaccionando a cada acción.
Al minuto 20, otra reacción de preocupación de Leo tras una corrida por derecha y mal rechazo de la defensa y al 21, aplauso y grito de ánimo ante una salvadora intervención de Callender. La cámara no pudo registrar la reacción de Leo al momento del gol de la apertura de Dynamo por parte de Dorsey, a los 25′. A partir de ahí, las risas terminaron y mucha muestra de tensión en el mejor de todos.
Al 28′, Yedlin cometió una imprudencia total al cruzar a Nelson dentro del área y generó la esperable reacción en Leo, quien ya sabía que no hacía falta VAR… quedaba la esperanza de que Callender se luciera, pero Bassi definió al medio engañando y Leo, así como todos, se quedaron la sensación de ese ‘casi’.
Segundo tiempo
Ya en el complemento, Martino mandó al campo a Josef Martínez en lugar de Taylor, y a Arroyo por Gómez. Ni bien iniciado el segundo tiempo, el venezolano tuvo el descuento pero desaprovechó la chance, ante un Leo contemplativo y serio, pero no dejaba de interactuar con su esposa y la de Busquets, que acompañaba a la familia. Al 55′ llegó la más clara para el Miami que hizo tomarse la cabeza a Leo, luego de un cabezazo fallido de Josef Martínez tras un centro de Farías, que no fue gol de milagro. Sobre el 60′, Cremaschi resolvió bárbaro una jugada en ataque y obligó al arquero a una brutal reacción para evitar el descuento.
Sobre el 72′ y tras el mejor momento del Miami, que no pudo traducir en goles su momento de predominio, Quiñónez llegó mano a mano tras encontrar mal parada a la defensa y anotó pero luego, el VAR lo anuló por fuera de juego. Fue un subidón de energía para el Inter, que fue en busca del descuento y de tanto ir, llegó sobre la hora al 91′ por medio de Josef Martínez que le puso suspenso al desenlace pero no alcanzaría.
Así pasó la segunda final del Miami en poco más de un mes, con Leo Messi desde la grada por lesión, pero que regresará próximamente para intentar ayudar al equipo al objetivo que le queda por delante, meterse en los playoffs de la MLS.