La cruda confesión de Alphonso Davies que preocupó a todo Bayern Múnich: “Estoy solo, soy un perdedor popular”

Todo le ha pasado muy rápido a Alphonso Davies, lateral izquierdo del Bayern Múnich. Tiene apenas 22 años, y ya conquistó cuatro Bundesligas, una Champions League, un Mundial de Clubes; jugó la Copa del Mundo con el país que representa, Canadá, tiene un futuro tan ilusionante como su presente, ha hecho mucho dinero, tiene fama, a su familia unida, a su novia… pero no está feliz. Siempre falta algo o bien, se pone la atención en lo que está faltando y no en lo que se tiene.

En ese escenario fue que joven futbolista, dueño total de la banda izquierda del Bayern y de la selección canadiense, sorprendió en una declaración en su cuenta de Twitch, en donde manifestó que le preocupa sentirse tan solo: “La vida como futbolista profesional es genial para relajarse y disfrutar, pero tras el entrenamiento no hay nada para hacer y eso es un poco preocupante. Como no tengo familia y mi novia no vive conmigo, estoy solo. Soy un perdedor popular”, sentenció el jugador.

El testimonio de Davies despertó la preocupación de la dirigencia del Bayern Múnich, y también la de los compañeros de equipo. Ya que, notaron cierto dejo de una pequeña depresión que de no hablarse podría traerle consecuencias, no graves, pero entienden que es importante acompañar a alguien tan chico, que vivió muchas emociones y hoy tras conseguirlo todo, tiene un vacío que le perturba.

Davies llegó con cinco años a Canadá, proveniente de Liberia. Escapó junto a sus padres de una guerra civil en el país y ya en tierra norteamericana empezó a jugar al fútbol. Se probó en Vancouver Whitecaps, club que participa de la liga estadounidense, y a los 16 años lo fichó el Bayern. Por cuestiones a conocer, su familia no lo acompañó y es por eso que el lateral se siente algo solo en Alemania, sumado a que su novia aún no reside con él.

Desde la dirigencia alemana confirmaron que pese a lo expresado, Davies se encuentra bien y su reflexión fue importante pero no arrojó cuestiones de las cuales preocuparse.