Se hizo oficial. Jorge Sampaoli dejó de ser el entrenador del Sevilla, que lo despidió por los malos resultados del equipo en LaLiga. A pesar de ello se filtró que había más problemas además de estar peleando el descenso en la Liga Española.
El Sevilla se enfrentará al Manchester United en los cuartos de final de la Europa League, pero la temporada es pésima para los andaluces. El equipo tiene 28 puntos en la Liga Española y se ubica 14°, a solo dos unidades del Valencia y Almería, 18° y 19° y que hoy estarían descendiendo.
“El Sevilla FC ha resuelto el contrato con su entrenador, Jorge Sampaoli, tras la derrota del equipo en Getafe, que ha vuelto a colocar el equipo al borde de las plazas de descenso. El hecho de que el equipo no haya logrado salir de las posiciones más bajas de la tabla desde su incorporación como técnico y la imagen ofrecida en los últimos encuentros del equipo han llevado al club a tomar esta decisión, en busca de una reacción en las doce últimas jornadas que restan para acabar la Liga”, aseguró el Sevilla en un comunicado.
Los problemas internos del Sevilla
Lo cierto es que el vestuario del Sevilla era una caldera. Jorge Sampaoli es un entrenador con un cáracter muy particular. Como con la Selección Argentina en Rusia 2018, los jugadores terminaron entrando en un círculo vicioso en el que ya no creían en su tarea.
Según precisiones del periodista Alonso Rivero (101 TV Sevilla), Sampaoli dejó un vestuario dividido. “Yo siempre he pensado que en el contexto en el que estaba a Sevilla no cabía Sampaoli. Cuando tienes a un entrenador que mira por él, segundo por él y después con él, te castiga“, aseguró.
Cabe recordar que a fines de febrero, se vivió un momento tenso en pleno partido con Osasuna. El equipo perdía 3-2, Nemanja Gudelj recibió anotaciones de Sampaoli en un papel y se las dio a Oliver Torres. Pasaron varios segundos en los que no entendían las indicaciones y el tiempo corría. Marcos Acuña se fastidió por la situación, tomó el papel, lo estrujó y lo tiró al césped.