La Selección argentina enfrentó por los cuartos de final del Mundial de Qatar 2022 a Países Bajos, un viejo conocido como Holanda, rival al que superó en un dura batalla por penales, y que por primera vez, decidió hacerse llamar de esa manera.
Argentina le ganó una final del mundo a Holanda en 1978. Perdió en los cuartos de final de Francia ’98. Venció por penales en la semifinal de Brasil 2014. También empató 0 a 0 en Alemania 2006 y cayó por goleada 4 a 0 en Alemania ’74. El próximo viernes, desde las 16, ambas selecciones volverán a enfrentarse en una cita mundialista, aunque con un cambio, ya no será Holanda, sino Países Bajos, ya que no son más holandeses sino neerlandeses.
El cambio de nombre se decretó de manera oficial el primer segundo de 2020. Desde entonces, para el protocolo lingüístico, los organismos oficiales, las áreas institucionales, las entidades privadas y las sugerencias internacionales, lo que antes era Holanda se convirtió en Países Bajos. Además de un rejuvenecimiento de la marca país, de una renovación moderna y vanguardista, el cambio de denominación es una deuda histórica: Holanda nunca fue un país, sino una región.
Técnicamente Holanda son dos de las doce provincias del país: Holanda Meridional -del sur- y Holanda Septentrional -del norte-, donde se albergan las ciudades más preponderantes. En Holanda están Amsterdam, Rotterdam y La Haya, grandes núcleos urbanos donde subsiste el poder económico y se tensa la política del país.
Pero no están, por ejemplo, ciudades como Eindhoven, Breda, Utrecht o Arnhem. Llamarlas como regiones holandesas es un error común que desde mediados de la década pasada se proyectó reparar. Lo correcto, lo justo, es emplear Países Bajos para referirse al viejo Holanda.
El país del Norte de Europa había comenzado años antes de la implementación del cambio de denominación en 2020 una campaña de promoción e información para instruir dentro y fuera del territorio nacional el proceso de reestructuración en el nombre: la ingeniería estatal, los órganos culturales, toda órbita oficial a través de iniciativas de marketing que procuraron reducir la utilización de Holanda para referirse a los Países Bajos.
Desde el primero de enero de 2020, el cambio de nombre acompañó una modificación del logo de la marca con las siglas NL -abreviatura de la denominación en inglés- y un dibujo en color naranja de un tulipán típico.
Países Bajos corrige el vicio en el que había caído la población hispanoparlante al concluir que las regiones populares y económicamente dominantes de Holanda representan al país en todo su conjunto. El uso coloquial de Holanda al ser reconocida como el área característica de la nación pasó a convertirse en el nombre de un país completo.