Los seguidores del tenis argentino coincidirán con que Roland Garros es el Grand Slam en el que suele haber bombazos argentinos, así lo ha demostrado la historia y así mismo lo han reafirmado Genaro Olivieri, Tomás Etcheverry y Francisco Cerúndolo. Si bien Olivieri cayó ante uno de los favoritos, Holge Rune y se quedó sin torneo, ni él esperaba semejantes resultados; distinta fue la suerte de Etcheverry y Cerúndolo, que en ambos casos sacaron a experimentados rivales de la competencia y van por más.
Francisco Cerúndolo, la raqueta número uno de Argentina, actualmente N°23, dio el golpe ante el estadounidense Taylor Fritz por 3-6, 6-3, 6-4 y 7-5, y en octavos se las verá con el verdugo de Olivieri, el danés Rune, de gran presente y que viene de vencer en el Masters de Roma a Novak Djokovic. En tanto, Etchverry, número 49 del ranking ATP, superó en sets corridos al croata Borna Coric 6-3, 7-6 (5) y 6-2, e irá por los cuartos de final cuando se mida con el japonés Yoshito Nishioka.
El caso de Etcheverry asombra en el sentido de que hasta este torneo, llevaba apenas una sola victoria en Grands Slams, pero esto habla de la gran temporada que está llevando adelante, tras ser además finalista en Santiago de Chile y Houston, sendos ATP 250.
Gran jornada entonces para Argentina, luego de que en la jornada de ayer Diego Schwartzman cayera sin atenuantes frente al griego y candidato al título Stefanos Tsitsipas.