Dani Alves, actualmente en prisión preventiva en España luego de haber sido denunciado por abuso sexual con acceso carnal por una mujer, en enero pasado, es nuevamente protagonista luego de que se accediera al que fue el cuarto testimonio suyo a la fiscalía que trabaja sobre el caso, del cual se desprenden nuevos detalles de lo ocurrido en aquel baño de la discoteca Sutton en Barcelona. Alves, que fue arrestado por falso testimonio y por temor a que se fugue, aclaró nuevamente que sus primeras versiones eran falsas ya que quería proteger su matrimonio ya que si confesaba el acto, su esposa pediría el divorcio, algo que ocurrió de todas formas.
Durante las últimas horas, el programa español Código 10 tuvo acceso a la última declaración del lateral brasileño y compartió con los televidentes el audio de lo que fue su cuarto (y último) testimonio ante la fiscalía española. “No ha sucedido nada que nosotros no quisiéramos. Siempre la traté con mucho respeto”, afirmó. Antes de comenzar a explicar lo que ocurrió aquella noche del 31 de diciembre en el baño del sector VIP del centro bailable Sutton, el ex PSG, Juventus y Barcelona, admitió que lo que iba a relatar era completamente diferente a su primera declaración y dijo que ese día: “Tenía una obsesión que era proteger mi matrimonio, proteger a la mujer que amo”.
“Fuimos custodiados a la mesa seis de la discoteca que está abierta a toda la sala. Hablé con Bruno (su amigo) y volvimos a hacer un gesto al camarero y el camarero enseguida invitó a tres chicas. Nos estábamos divirtiendo y enseguida hubo una atracción sexual. Cuando entramos en el baño, nos pusimos frente a frente uno del otro. Sí. Ella me besó y empezó a quitarme los pantalones“, indicó acerca de cómo se iniciaron los acercamientos entre ambos, tras lo cual contó que la mujer lo sentó en el inodoro y le hizo sexo oral.
Luego, todo según el audio que filtró el medio español, Alves continuó: “Le pregunté dos veces si le estaba gustando y me dijo que sí. Y fue cuando ella se incorporó de espaldas a mí, juntando nuestro sexo en penetración. Al finalizar la levanté, que estaba encima de mí, la levanté y me corrí fuera de su sexo. Ni en el reservado ni en el baño, nunca me dijo que parara en ninguna acción. No ha sucedido nada que nosotros no quisiéramos. Siempre la traté con mucho respeto“.
Respecto de por qué cree que la mujer lo denunció, sostuvo que su poco trato tras el acto sexual y falta de tacto podrían haber llevado a que la mujer se enoje: “Salí al reservado. Y después salió ella. Supongo que enfadada por mi actitud. Yo fui siempre un cómplice de las ganas que tenía o de las ganas que yo tenía. Yo le dije de ir al baño y trasladar todo lo que estábamos viviendo ahí (en el VIP). Simplemente eso y ella me dijo que sí”.